En entradas anteriores hemos hablado sobre qué medidas aconsejaban las sociedades científica ante la infección por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 (COVID-19), y también hemos tratado las recomendaciones para pacientes. En este periodo, en que todo va volviendo a la “normalidad”, queremos hacernos eco de una campaña lanzada recientemente por la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) y la Asociación para el Estudio de la Biología de la Reproducción (ASEBIR) junto con la compañía Merck (líder en ciencia y tecnología): “LA REPUESTA ES AHORA”. El objetivo de dicha campaña no es otro que el de transmitir tranquilidad a los pacientes, tras todo el esfuerzo realizado por parte de los equipos de reproducción para adecuarse a las circunstancias actuales, para iniciar sus estudios de fertilidad o continuar con sus programas de reproducción asistida.
En España una media de 1 cada 10 nacimientos se produce gracias a las técnicas de reproducción asistida (TRAs). El hecho de paralizar toda la actividad durante el periodo de alarma se ha calculado que supondrá un descenso, dentro de nueve meses, de unos 4000 nacimientos. Hecho bastante dramático si tenemos en cuenta que España se encuentra entre los 10 países con menor tasa de natalidad.
Ahora, que parece que volvemos a una cierta tranquilidad frente al COVID-19, es momento de plantearse el seguir o iniciar los programas de fertilidad. Especialmente en casos muy concretos donde el tiempo es crucial, por ejemplo, la edad de la mujer. Como bien sabemos, por encima de los 38 años la probabilidad de embarazo empieza a declinar siendo a partir de los 40 más difícil conseguir un embarazo con óvulos propios dado el aumento significativo de anomalías cromosómicas y porcentaje de abortos.
Otro caso donde el tiempo es crucial es en los enfermos de cáncer, ya que entre los diversos tratamientos contra la enfermedad, algunos pueden comprometer la fertilidad de una persona (capacidad para tener hijos). A fin de preservar la fertilidad, en la medida de lo posible, tanto femenina como masculina, tanto en adultos como en jóvenes o niños con cáncer, es recomendable hablar sobre su proyecto reproductivo, aunque en ese momento no se lo hayan planteado. Es importante hablar con su oncólogo sobre cómo podrá verse afectada la fertilidad antes de iniciar el tratamiento y si es necesaria la intervención de un especialista en reproducción asistida para valorar en cada caso la preservación de la fertilidad.
Por otro lado, quiero destacar para vuestra tranquilidad, el gran interés y preocupación por ofrecer un servicio con garantías de seguridad entre los profesionales de la reproducción asistida. Durante la cuarentena los profesionales no hemos dejado de formarnos y compartir medidas de acción para garantizar la salud tanto de los pacientes como de los futuros niños nacidos. Os lo puedo asegurar, de hecho comparto esta imagen donde podéis ver una pequeña muestra de los seminarios, charlas, mesas redondas, webinars, a los que he tenido la oportunidad de asistir junto a centenares de profesionales. La actividad ha sido tal que a veces no había tiempo material para acudir a todas las propuestas formativas.
La gran mayoría de especialistas en reproducción asistida coinciden en este momento, aunque no se puede aseverar nada ya que es un virus que estamos conociendo, es que no hay ninguna razón que prohíba el quedarse embarazada, ya sea de manera natural o asistida. Tampoco hay pruebas de que los gametos (óvulos y espermatozoides) sufran alteraciones por el virus; ni que exista una transmisión vertical de la infección (madre-hijo) o el número de aborto sea mayor.
En resumen, no parece que haya ningún impedimento para volver a retomar los ciclos que quedaron suspendidos o a medias o iniciar los estudios de fertilidad, observando siempre las medidas de precaución y seguridad, así como siguiendo los consejos del personal sanitario. No obstante, ante cualquier duda los profesionales estamos a vuestra disposición para aclarar todo tipo de cuestiones que os puedan surgir.
No lo dudes, el momento es AHORA.
Victoria